¿Qué son los acabados en las fachadas SATE?
El acabado de una fachada SATE es su revestimiento superficial, la parte más visible del sistema que aporta su aspecto final a los Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior.
Los acabados en SATE son muy variados para poder personalizar la fachada al máximo. De esta forma, no se sacrifica la estética del edificio después de colocar el aislamiento. Es más, en el caso de las rehabilitaciones SATE, estos acabados nos dan la oportunidad de mejorar mucho la apariencia externa de los edificios intervenidos. ¿Quieres saber qué opciones hay en acabados para SATE?
Revestimientos de acabado SATE
Los revestimientos de acabado están disponibles en una extensa variedad de terminaciones, según la apariencia y el grado de protección que se quiera lograr. Se realizan con morteros impermeables y transpirables, que pueden ser morteros acrílicos minerales, con siloxanos o incluso con nanopartículas para mejorar las prestaciones estéticas y funcionales.
Según el modo de aplicar estos morteros y el tipo de árido que contengan, se pueden obtener distintas texturas para los revocos en los acabados SATE:
- Aplicación proyectada: el mortero se proyecta sobre la fachada con una pistola. Se pueden conseguir diferentes rugosidades según la boquilla que se utilice o bien terminarlo de forma manual.
- Aplicación manual: el mortero se aplica con una llana y se aplana la superficie o se crean texturas con métodos como el fratasado, el rayado o el planchado.
Como alternativa a los revestimientos continuos hay también acabados altamente decorativos que permiten crear fachadas únicas con diversos efectos. Matices metálicos, reflejos brillantes o superficies texturadas que simulan materiales naturales.
Acabados cerámicos en SATE
En los acabados SATE aplacados, el sistema se reviste con placas cerámicas, de piedra u otros materiales. En estos casos, el SATE se remata con una terminación discontinua mediante el uso de plaquetas flexibles o baldosas cerámicas de pequeño y gran formato. El uso de acabados aplacados nos permite además imitar materiales como el ladrillo cara vista o terminar el SATE con un acabado piedra.
Los acabados cerámicos tienen una elevada resistencia mecánica y a los impactos, además tener un mantenimiento fácil frente a la suciedad externa.
¿Qué tener en cuenta para elegir el acabado SATE?
La estética que queremos conseguir es uno de los puntos principales al elegir el acabado en SATE. Si necesita integrarse con el entorno o con otras edificaciones existentes, si en una rehabilitación buscamos mantener el aspecto original o bien renovarlo… la variedad de acabados disponibles hacen que no haya límites en cuanto a la apariencia final.
Para elegir los colores en SATE, hay que tener en cuenta que se recomiendan tonos con un índice de reflexión mayor al 25% (el 0% corresponde al negro y el 100% al blanco). Son preferibles los tonos claros, porque captan menos el calor y protegen más el revestimiento. La textura influirá también en cómo se percibe la vivienda. Tanto con revocos como con acabados aplacados, podemos lograr acabados más rústicos, más modernos, imitar distintos materiales…
Por último, también es importante considerar la durabilidad de los materiales o incluso su facilidad de limpieza o mantenimiento. Los acabados cerámicos, aunque tienen un coste mayor, ofrecen otras prestaciones que pueden resultar interesantes frente a los revocos.
En Servisate te ayudamos con tu proyecto de SATE a todos los niveles. ¡Contáctanos si necesitas asesoramiento!